Pues eso, que mientras los bárbaros, zoquetes y sangrientos españolitos estábamos inaugurando el primer centro psiquiátrico del mundo con una organización terapéutica, los gentlemen ingleses pasaban sus ratos de ocio visitando el espectáculo que brindaban los pobres enfermos mentales. Cosas de la Leyenda Negra.
Antiguamente, la locura se identificaba con males sobrenaturales, propios de posesiones demoníacas o como castigos divinos por los pecados cometidos. Posteriormente se comenzó a identificar como la pérdida de la razón cuyo único remedio era el confinamiento y los salvajes experimentos, más propios de la tortura, a los que los enfermos eran sometidos. En el siglo XIV, lo que había sido un convento de la Orden de la Estrella de Belén en Londres se convirtió en el Bethlem Royal Hospital, también llamado Bedlam, y fue el primero en acoger pacientes con enfermedades mentales. Lamentablemente el hospital no se hizo famoso por ser pionero en tratar enfermedades mentales, sino por el brutal maltrato dispensado a los pacientes (los considerados violentos o peligrosos eran atados y encadenados). De hecho, el término Bedlam ha quedado como sinónimo de caos, confusión, alboroto…
Y para rematar la faena, durante el siglo XVIII y parte del XIX Bedlam se convirtió en una atracción turística. Por el módico precio de un penique –el primer martes de cada mes era gratis– se podía contemplar el espectáculo que brindaban los pobres dementes. Además, si el espectáculo de aquel día no había cumplido con las expectativas se podían llevar palos para azuzar a los dementes y elevar el nivel del show. Algunos también les daban alcohol para ver cómo actuaban borrachos. En 1814 se registraron más de 96.000 visitas, el mayor espectáculo de Londres.
¿Y en España? Aquí teníamos a Joan Gilabert Jofré, conocido como padre Jofré, un religioso de la Orden de los mercedarios que dedicó su vida a la atención de los pobres y los enfermos mentales.
La Orden Real y Militar de Nuestra Señora de la Merced y la Redención de los Cautivos, más conocida como Orden de la Merced, fue fundada en 1218 por san Pedro Nolasco para la redención de los cristianos cautivos en manos de musulmanes. Los frailes hacían, además de los tres votos de la vida religiosa, pobreza, castidad y obediencia, un cuarto: dedicar su vida a liberar esclavos. Recogían a indigentes y a cautivos que regresaban y no tenían donde ir; recaudaban dinero y organizaban expediciones redentoras, generalmente al norte de África, y, en el supuesto de que no llegase el dinero, se quedaban ellos en lugar de los cautivos. Al igual que el resto de mercedarios, el padre Jofré participó en varias de estas expediciones, hasta que un buen día, de regreso a su Valencia natal, después de presenciar el maltrato que se le daba a un loco en la calle, decidió emprender su particular cruzada en favor del trato humano y terapéutico de estos enfermos. Fundó un hospicio para enfermos mentales denominado de los Santos Mártires Inocentes, en el año 1409, con el objeto de recoger a los pobres dementes y expósitos, y fue aprobado por el papa Benedicto XIII y el rey Martín I de Aragón. Los Santos Mártires Inocentes fue el primer centro psiquiátrico del mundo con una organización terapéutica. Con esta fundación asistencial se empezó por primera vez en Europa a proporcionar a los enfermos mentales tratamiento médico hospitalizado y una residencia donde pudiesen vivir acogidos. Dicho hospicio se convirtió en el actual Hospital General Universitario de Valencia.
Es justo y necesario
Lastima que no saben francés porque podrían leer en la Wikipedia que el primer hospital psiquiátrico conocido fue establecido en Bagdad, en el año 705…
…El primer hospital psiquiátrico fue fundada en Bagdad en el año 705 , y asilos psiquiátricos se construyeron en Fez al comienzo del viii ° siglo, en El Cairo en el año 800, así como Damasco y Alepo en el año 1270. Los pacientes fueron tratados de manera voluntaria con baños, medicinas, música y otras actividades terapéuticas .
El «manicomio» más antiguo de Europa es el Hospital Bethlem , inaugurado en 1247 en las afueras de Londres y todavía en funcionamiento…
Es que la leyenda negra… vaya maldita leyenda negra…
Respecto al hospital de Betlehem o Bedlam, ya he dejado claro en el artículo lo que era. Tienes razón en que en el mundo islámico existían este tipo de centros, pero lo que hace diferente a los Santos Mártires Inocentes del resto es que a la atención humanitaria se añadía la asistencia médica. Sus internos eran considerados enfermos y las actividades estaban orientadas a aliviarles y, en la medida de lo posible, curarles de su enfermedad. El tratamiento giraba en torno a la terapia ocupacional, se establecieron criterios de clasificación, distinguiendo entre los curables, que eran objeto de esfuerzos terapéuticos, y los incurables, a los que se les daba alojamiento y custodia.
Estos es lo que opinan varios historiadores de la medicina: «la cuna de la Psiquiatría estuvo en España, donde se construyeron los primeros edificios convenientes y adecuados para hospitalizar a dementes»(Alexander y Selesnick, 1970); «No fue Pinel sino que fueron los psiquiatras españoles en Valencia en 1409 los primeros en retirar las cadenas e instituir el tratamiento moral. Se utilizaron el ejercicio, juegos, trabajo, entretenimiento, dieta e higiene» (Schmitz, 1884-1885); «Uno de los éxitos que pertenece exclusivamente a los españoles es el tratamiento moral para combatir las afecciones mentales y el establecimiento en el siglo XV de edificios confortables y adecuados para la admisión de esta clase de infortunados» (Hernández Morejón, 1842).
No podemos olvidar el Maristan , hospital y centro psiquiátrico del siglo XIV, en lo que ahora es Europa, en Granada. Mientras Muhammad V lo construía, ademas del patio de los leones, en «Europa» corría la peste negra y trotaba la guerra de los 100 años.