Aunque en 2005 los científicos lograron secuenciar el genoma del virus de la llamada gripe española gracias a una muestra obtenida de un cadáver congelado en una tumba de Alaska, todavía existen misterios sin resolver de esta pandemia. La gran diferencia de esta gripe con el resto fue la alta tasa de mortalidad y, sobre todo, el hecho de que fuera especialmente virulenta entre adultos sanos con edades comprendidas entre los 20 y 40, cuando las gripes comunes lo son con colectivos más vulnerables, como niños, ancianos o enfermos -se cree que la enfermedad provocó una reacción exagerada del sistema inmunitario, lo que hizo que en personas jóvenes y sanas se volviera contra sí mismo-. El origen exacto de la epidemia no ha podido establecerse con certeza, aunque se sabe que el primer caso se registró el 4 de marzo de 1918 en Fort Riley, uno de los campamentos militares establecidos en Kansas (EE.UU). Aunque tenía un gran poder de propagación, como cualquier gripe, aquel virus no resultaba más letal que la gripe estacional de todos los años. En aquel momento se determinó que la neumonía fue la causa de la muerte de varios soldados del campamento.
En el verano de 1918 el virus debió sufrir alguna mutación convirtiéndolo en el agente letal más temible de la historia. El primer caso de esa segunda oleada mortífera se registró el 22 de agosto de 1918 en Brest, el puerto francés por el que entraban la mayoría de las tropas estadounidenses que se incorporaban al frente europeo de la Primera Guerra Mundial. A medida que los soldados se dispersaban para luchar en la Primera Guerra Mundial, el virus se abrió camino en todo el mundo, desde los campos de batalla europeos hasta áreas remotas de Siberia, Alaska o las islas del Pacífico. Se calcula que el virus infectó casi al 40% de la población mundial en apenas 18 meses, de los que murieron más de 50 millones.
¿Por qué se llamó gripe española?
Cabría pensar que llevaba ese nombre porque se hubiese originado en España, porque el primer caso registrado fuese español o que hubiera sido especialmente virulenta en nuestro territorio. Así que, sin darse ninguna de estas circunstancias que podrían haber justificado su nombre, ¿a qué se debe? Pues a la censura o, mejor dicho, a la no censura de los medios españoles.
Habría que recordar que nos encontramos en la Primera Guerra Mundial, un conflicto bélico que comenzó en julio e 1914 y del que todos los contendientes pensaron que iba a ser corto -incluso se hablaba que terminaría antes de la Navidad de 1914-. Así que, basaron su estrategia en masivas ofensivas de la infantería, pero el desarrollo de nuevas armas para matar de forma masiva y a distancia estabilizaron los frentes y dieron lugar a la llamada guerra de trincheras que alargó las miserias de la guerra. Para no causar alarma social y evitar que la población se echase sobre ellos, así como la desmoralización de las tropas, apenas ya motivadas, los gobiernos de los países beligerantes decidieron ocultar y censurar la información sobre aquella enfermedad que causaba más muertes que la propia guerra. Como España se declaró neutral en aquella contienda, los medios no fueron censurados y se informó puntualmente del avance y la mortandad de la pandemia, convirtiendo a nuestro país en referente informativo internacional… y dando nombre a la pandemia.
Gracias, que anecdótico la manera de adquirir el nombre. Muy interesante los datos sobre la virulencia de la gripe y la mala fortuna qdel periodo que facilitó su expansión.
Eso es como la sífilis, conocida como el mal español o el mal de Nápoles.O que se trate de un mal venido de América.
Pero en este caso hay unanimidad a la hora de citarla.
Bueno a la sífilis se la conocía en Europa como el mal francés, excepto en Francia que la llamaban el piojo español, por aquello de quitarse la mala fama…pero como mal francés pasó a la Historia.
Mi abuelo, precisamente murió de esta pandemia y la señora del segundo marido de mi abuela también ( se casaron ambos, mi abuela le convenía tenía tres hijas de 5 a 10 años) parece que aquí en el pueblo hizo estragos la gripe española.
Nombres xenófobos (de Wikipedia)
Las distintas denominaciones utilizadas entre los siglos XV y XVII dan idea de la vasta extensión de la enfermedad, y de la costumbre de culpar de ella a los países vecinos.13
En Italia, Alemania y Reino Unido se ha denominado «enfermedad francesa».
En Francia, desde la epidemia en el ejército francés en las guerras italianas, se le llamó «mal napolitano o enfermedad napolitana».
En Rusia, «enfermedad polaca».
En Polonia, «enfermedad alemana».
En los Países Bajos, Portugal y el Norte de África, «enfermedad española» o «enfermedad castellana».
En Turquía, «enfermedad cristiana».
En España, «morbus gallicus» («mal francés») o «morbo gálico» .
Lo evidente es que la XENOFOBIA es una enfermedad que nos viene acompañando a los humanos desde hace muchos siglos
Eso es lo que ocurrió con la sífilis.
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