Establecida en China por Kublai Khan, la dinastía Yuan estaba llegando a su fin a mediados del siglo XIV. Los Ming y los Han eran los dos grupos que optaban a suceder a los Yuan, y, lógicamente, serían las armas las que determinasen quién se presentaría como aspirante al trono de los Yuan. Del 30 agosto al 4 de octubre de 1363 ambas dinastías librarían en el lago Poyang la considerada como la batalla naval más grande de toda la historia. Parece difícil que la mayor batalla naval se libre en un lago, pero las dimensiones del Poyang, la masa de agua dulce más grande de China, lo permitían: 170 kilómetros de largo por 17 de anchura media (3.585 km²), y una profundidad media de 8 metros y máxima de 25.
Con sus lou chan, verdaderas fortalezas flotantes, Chen Youliang, comandante de los Han, inició el asedio naval de la ciudad de Nanchang, donde se habían hecho fuertes los Ming. A pesar del intenso bombardeo, las fortificaciones de la ciudad aguantaron los ataques. Uno de los soldados sitiados consiguió romper el cerco y avisar del asedio a Zhu Yuanzhang, el general del ejército de los Ming. Reagrupó sus fuerzas y se dirigió al lago. Las naves de Zhu eran muchas más pequeñas que las de Chen Youliang, por lo que no podían plantear un enfrentamiento directo contra los mastodónticos barcos. Eso sí, dada su rapidez y maniobrabilidad, eran idóneos para lanzar ataques relámpago y huir hacia aguas poco profundas donde las fortalezas flotantes no llegarían por miedo a quedar varadas. Como el daño causado por las embarcaciones de los Ming era escaso, Zhu Yuanzhang optó por incendiar algunas barcazas y lanzarlas contra los lou chan a modo de brulotes, e incluso desplazó embarcaciones por tierra para rodearlos y atacarlos desde todos los frentes. Tras algo más de un mes jugando al ratón y al gato, la batalla entró en un punto muerto. Zhu decidió retirarse a las desembocaduras de los ríos Yangtsé y Gan y bloquear la salida del lago encadenando sus barcos. Tras un mes de bloqueo y harto de esperar acontecimientos sin que nada ocurriese, Zhu Yuanzhang lanzó un ataque total con todos medios disponibles, y… una flecha perdida lo cambió todo. En medio de la refriega, Chen Youliang cayó mortalmente herido por una flecha. Ante la muerte de su general y la falta de liderazgo, los Han se rindieron. Los Ming eran los aspirantes oficiales. Apenas cinco años más tarde, con la caída de los Yuan, Zhu Yuanzhang se convertiría en el primer emperador de la dinastía Ming.
El título de batalla naval más grande se debe al número de contendientes, participaron unos 850.000 soldados: 600.000 de los Han y 250.000 de los Ming.
Si hoy en día quisiésemos recrear esa batalla en el mismo lugar, no podríamos. Los 850.000 soldados tendrían que luchar a pie. La construcción de la presa de las Tres Gargantas, responsable de la reducción del caudal del Yangtsé, la sequía y, sobre todo, la extracción de arena han provocado que el lago se esté convirtiendo en una inmensa pradera. Más de 236 millones de metros cúbicos de arena se retiraban cada año del lago para su uso en la construcción, convirtiendo al Poyang en la mina de arena más grande del mundo.
Excelente narración.
Me trajo a la memoria la situación actual del puerto de Palos y del puerto de Trajano, muy alejados de la actual línea de costa.
Saludos desde Uruguay.
Luis
Nuevamente, muy buen trabajo, Javier. Te envío mi reconocimiento y estímulo para que sigas con estas notas. Abrazo desde Buenos Aires.
Motivos suficientes para seguir adelante.
Gracias Eduardo
[…] Historia militar. Antigüedad: La batalla naval más grande de la historia… ahora sería terrestre: http://historiasdelahistoria.com/2019/03/14/la-batalla-naval-mas-grande-de-la-historia-ahora-seria-… […]
Hola . Dos días a la semana te escojo para incrementar mi cultura general. Tus relatos me encantan amenos, sin parafernalia , claros y cortos. Las historias detrás de la historia nos dejan muchas sorpresas y me cautivan.
Gracias y sigue adelante. Saludos desde Venezuela
Mil gracias