Cuando John H.G. Lee fue sentenciado a la pena de muerte, le dijo al juez:
La razón por la que estoy tan tranquilo es que yo confío en el Señor y él sabe que soy inocente.
Y parece ser que el Señor, el destino, la suerte – o vete tú a saber qué – creyeron en su inocencia porque no se pudo ejecutar la sentencia dictada. Pero echemos marcha atrás en esta historia.
John H.G. Lee nació en Abbotskerswell, Devon (Inglaterra) y muy pronto dejó la escuela para ponerse a trabajar como sirviente de Emma Keyse, en la cercana aldea de Babbacombe. En 1879, abandonó la casa para enrolarse en la Royal Navy y, tras pasar unos años en la cárcel por robo, en 1884 regresó para volver a trabajar para Emma Keyse. La mañana del 15 de noviembre de 1884 aparecía el cuerpo de Emma Keyse con la garganta seccionada, tres heridas en la cabeza y parcialmente quemado. Como era de esperar, las sospechas cayeron en el servicio y, concretamente, en John Lee; ser el único hombre en la casa en el momento que se produjo el asesinato y tener una herida en el brazo fueron motivos suficientes para declararle culpable.
El 23 de febrero de 1885, fue sentenciado a ser ahorcado en la prisión de Exeter. James Berry, el verdugo del penal, probó la trampa en el cadalso y verificó que todo funcionaba correctamente, pero en el momento de la ejecución el mecanismo falló… una, dos y tres veces. La ejecución fue aplazada y, posteriormente, el secretario de Interior, Sir William Harcourt, conmutó la pena de muerte por la cadena perpetua. Tras 22 años, y varias apelaciones, John Lee fue liberado.
En aquel momento se perdió la pista de John Lee, aunque parece ser que pudo abandonar el país para trasladarse a EEUU donde continuó su vida en el anonimato. Se cree que John H.G. Lee murió el el 19 de marzo de 1945 en Milwaukee donde apareció una tumba con su nombre y año de nacimiento. Él fue «el hombre que no pudo ser ahorcado«.
Idea: JMNoticias
Fuentes e imágenes: BBC, Side3, Murder Research
[…] de las enfermedades más raras y curiosas del mundo 4 alma 17 El condenado al que se le conmutó la pena de muerte por no poderlo ejecutar… en tres ocasiones top por jsanz en cultura | historia hace […]
Un tipo con suerte, como esos a los que fusilan y siguen vivos para contarlo. Más fácil es que te toque el gordo de Navidad.
Un saludo.
Cuando te fusilan es más difícil… suele haber «tiro de gracia».
Salu2
Aunque no haga ninguna gracia.
Información Bitacoras.com…
Valora en Bitacoras.com: Cuando John H.G. Lee fue sentenciado a la pena de muerte, le dijo al juez: La razón por la que estoy tan tranquilo es que yo confío en el Señor y él sabe que soy inocente. Y parece ser que el Señor, el destino, la suerte – o …..
[…] Cuando John H.G.Lee fue sentenciado a la pena de muerte, le dijo al juez: La razón por la que estoy tan tranquilo es que yo confío en el Señor y él sabe… […]
¿Alguien le pasó un billete de lotería por la chepa?
Para la lotería la suya… ¿Qué probabilidades puede haber de que falle la trampilla 3 veces?
Por eso..por eso…
A propósito…pásate por mi casa…tienes algo esperándote…
(Sé que eres humilde y los halagos fatuos no te impresionan)
😉
Tengo tres post pendientes de leer… esta noche paso.
[…] "CRITEO-300×250", 300, 250); 1 meneos El condenado al que se le conmutó la pena de muerte por no poderlo ejecutar… en tres ocasiones historiasdelahistoria.com/2012/10/02/el-condenado-al-que-… por conversador hace […]
Pues no hace mucho a un americano le paso algo parecido y no se la conmutaron a pesar de las solicitudes.
http://elpais.com/diario/2009/10/11/domingo/1255233153_850215.html
Según parece aun esta vivo, pero no le han conmutado la pena, aunque esta el recurso en espera.
Los humanos sois horribles
¿Y si fuese porque son inocentes?
Lo son, lo son…
Vete tu a saber que…
Interesantísima historia, como siempre. El caso es que había un grupo (creo que irlandés, no recuerdo) del que tengo algunos discos por casa, que se llama «The man they couldn’t hang» (espero haberlo escrito bien) y, ahora que lo pienso, creo que su nombre debe ser una especie de homenaje al protagonista de la historia de hoy. Aún recuerdo que llevaba un parche de ellos en la chaqueta, una horca con el nombre del grupo debajo. Por cierto, eran bastante buenos. Como siempre, he pasado un muy buen rato leyendo esta curiosa historia.
Has dado en el clavo…
http://en.wikipedia.org/wiki/The_Men_They_Couldn't_Hang
Salu2
Recuerdo esa historia, está claro que era inocente y por eso falllaron todos los intentos de cumplir la sentencia, ¿Dios? ¿suerte? lo que sea es que el hombre se salvó…
Abrazos Javier,
Más tarde se sospechó de otra persona pero nunca se juzgó a nadie más por este crimen.
Un abrazo
[…] extraído de: http://historiasdelahistoria.com/2012/10/02/el-condenado-al-que-se-le-conmuto-la-pena-de-muerte-por-… Share this:FacebookTwitterCorreo electrónicoMe gusta:Me gustaSe el primero en decir que te […]