Este post sólo pretende servir como ejemplo para demostrar que los extremismos y fundamentalismos en cualquier ámbito de la vida (ideología, religión, política, deporte, etc) nos vuelven estúpidos y aborregados o, peor aún, violentos.
Nos trasladamos a la Era Victoriana, más o menos coincidente con el reinado de Victoria I del Reino Unido (1837-1901), que se caracterizó por la Revolución Industrial y la expansión de su imperio colonial. Estos significativos cambios a nivel social, económico y tecnológico consolidaron al Reino Unido como la primera potencia de su época.
A pesar de estos cambios, la sociedad victoria se seguía rigiendo por los principios puritanos: vida discreta y ordenada, austeridad económica, metodismo religioso y conservadurismo político. El libro de cabecera de los puritanos era el «Libro de etiqueta de lady Gough» (una especie de manual del perfecto puritano). Entre otras muchas lindezas, se aconsejaba, en aras del decoro, no mezclar en una misma estantería los libros escritos por hombres y por mujeres, debían colocarse en bibliotecas separadas.
Y para rizar el rizo
Sólo podían estar juntos, si los autores estaban casados
Y yo me pregunto:
¿Dónde se colocarían los libros escritos por mujeres bajo el seudónimo de un hombre? Como el caso de Fernán Caballero seudónimo de la escritora española Cecilia Böhl de Faber y Larrea
Fuente: Feas to fhate and fear
[…] En aras del decoro, no mezclar libros escritos por hombres y por mujeres historiasdelahistoria.com/2010/08/15/en-aras-del-decoro-no-m… por Torosentado hace 2 segundos […]
Información Bitacoras.com…
Valora en Bitacoras.com: Este post sólo pretende servir como ejemplo para demostrar que los extremismos y fundamentalismos en cualquier ámbito de la vida (ideología, religión, política, deporte, etc) nos vuelven estúpidos y aborregados o, peor aún, v…..
como si los libros hicieran «algo»… xD
Tela marinera y eso que la que mandaba era una Reina.
Un abrazo.
[…] » noticia original […]
Muchas de estas costumbres persisten hoy en día. Los ingleses, y lo sé bien, son especialistas en hablar durante horas sobre el tiempo para no meterse en ningún jardín
Siempre me fascinó la historia. Gracias por tu contribucion a «nuestra» cultura.
Pues ya sabes, hay que mantener las apariencias que es la única forma de vivir que conocen muchos.
Un beso enorme
Un nivel de estupidez difícil de superar.
Saludos.
@Mathias, cuando los ideales se llevan al extremo suelen derivar en circunstancias extrañas.
@senovilla, en ciertas circunstancias las que sufren la discriminación son las defensoras de tales ideales (machismo defendido por mujeres, mujeres del Islam…)
Un abrazo
@Kikas, si alguien puede hablar con cierta autoridad de las distintas sociedades es un viajero impenitente como tú.
Salu2
@José, sólo son historias, con minúscula, de la gran HISTORIA.
Gracias
@laMar, pero ya sabes amiga que, a veces, las apariencias engañan.
Un beso
@Toro, circunstancias de un momento concreto y de una sociedad estricta.
Siempre aprendo de visitar tu casa. En este caso menuda curiosidad de tener la biblioteca.
Abrazo
@José Jaime, ya sabes que mi casa es tu casa.
Un abrazo
Ahora somos tan modernos que utilizamos la arroba para evitarnos esos problemas. Sé que es una moda que al menos yo confío en que sea pasajera, porque me mata los ojos ver una carta con el encabezado «Estimad@s señor@s:». Si Cervantes levantara la cabeza…
Creemos que hemos evolucionado, pero quizá no tanto 🙁
@Fernando, es que no citar ambos géneros es políticamente incorrecto… Cosas del inigualable Ministerio de Igualdad (miembros y miembras)
Sin comentarios… Todo dicho.
Saludos.
nunca podre entender actitudes así.
@Oscar, sólo hay que trasladarse a la época victoriana… nada más.
Pues entonces mi biblioteca es lo más cercano a un puticlub me temo, ;-P
@Skiken, pues ya sabes… saca todos lo libros y vuelve a colocarlos según los criterios victorianos 🙂
Supongo que los » contestatarios » de la época » en todas ha habido personas adelantadas a su tiempo» lo pasarían fatal y más a sabiendas de la hipocresía que imperaba en ciertos ambientes de clases pudientes, donde casi todo era de cara a la galería…
Desde luego que habría que ver las trastiendas,de estos personajes seguro que serían muy interesantes. J. el destripador andaba por el Londres la nuit haciendo de las suyas o sea destripando prostitutas,que con los antecedentes morales al uso pués ya me direis, sale un loco de estos y la que forma… pensando que hace bien quitando a esas pobres de enmedio.
RT @jsanz: En aras del decoro, no mezclar libros escritos por hombres y por mujeres http://bit.ly/9Rxcfk
Que yo sepa el extremismo no procede de las buenas gentes, sino de los dirigentes políticos y religiosos. Son esos los aborregados. A mí, y a cualquier particular que ignore a estos «líderes», nos da lo mismo lo que nos recomienden. Y en los tiempos modernos existe un extremismo oculto en la publicidad televisiva. Pasad de ellos. Que se den las cremas rejuvenecedoras los políticos. Que practiquen con esa supermáquina para hacer culturismo en casa. Que se queden con su creacionismo y su cienciología. Y que nos dejen en paz. O como se suele decir por aquí, vivie y deja vivir.
@Santaklaus, me quedo con el vive y deja vivir
RT @jsanz: En aras del decoro, no mezclar libros escritos por hombres y por mujeres http://bit.ly/9Rxcfk
En aras del decoro, no mezclar libros escritos por hombres y por mujeres http://bit.ly/byguGH (Durante Victoria I ¿de acuerdo?)
[…] En aras del decoro, no mezclar libros escritos por hombres y por mujeres (56) […]
Esta medida se tomó después de que varios libros quedaran embarazados.
[…] tocó vivir en la Era Victoriana (reina Victoria I del Reino Unido) cuya sociedad se regía por los principios puritanos: vida […]
[…] Nos trasladamos a la época victoriana, más o menos coincidente con el reinado de la reina Victoria I del Reino Unido (1837-1901), que se caracterizó por el enorme desarrollo económico producto de la llamada Revolución Industrial y la expansión del Imperio colonial británico. Estos significativos cambios a nivel social, económico y tecnológico consolidaron al Reino Unido como la primera potencia de su época. A pesar de estos cambios, la sociedad victoriana se seguía rigiendo por los principios puritanos: vida discreta y ordenada, austeridad económica, metodismo religioso y conservadurismo político. El libro de cabecera de los puritanos era el Libro de etiqueta de lady Gough -una especie de manual del perfecto puritano- llegando a extremos tan absurdos como el de aconsejar no mezclar en una misma estantería los libros…. […]
vaya ….puritanismo o hipocresia a lo exagerado? solo faltaba que las damas no usaran sabanas tocadas por hombres, no esperen eso si que debia de ser un escandalo !
[…] No mezclar libros escritos por hombres y mujeres Nuestra primera historia se remonta a los años 1837-1901 donde la Revolución Industrial produce un cambio social, económico y tecnológico poniendo al Reino Unido como la primera potencia de su época. Pero estos cambios no influyeron para nada en los principios puritanos de la sociedad; una vida discreta y ordenada, austeridad económica, metodismo religioso y conservadurismo político. El libro de cabecera era […]