Hasta la Segunda Guerra Mundial no comenzó a utilizarse el radar (término derivado del acrónimo inglés radio detection and ranging, “detección y medición de distancias por radio”) como dispositivo de localización de los aviones enemigos. Antes, los bombarderos sólo podían ser detectados visualmente, cuando ya era muy tarde, o por medio de dispositivos de localización acústica de múltiples formas y tamaños:

Kent (Inglaterra) 1920-1930:

Una antena parabólica de hormigón de unos 30 metros de altura. Enfocados hacia el canal de la Mancha, para detectar las posibles incursiones de aviones desde el continente, actuaban como receptores de ondas sonoras, hasta una distancia de más de 30 Km, y un operario desde su interior con un estetoscopio conectado a los platos podía detectar la distancia y la dirección de los aviones. Hoy se están rehabilitando.

Japón; el emperador Hirohito pasando revista a las tubas de guerra japonesas.

EEUU; sistema de dos cuernos en Bolling Field en 1921.

Francia; localizador acústico 1930

Alemania; llamado Ringtrichterrichtungshoerer (o RRH),1940

Checoslovaquia; cuatro receptores acústicos de localización 1920

Y otros que parecen más del ámbito civil que militar:



Fuentes: Retronaut, Acoustic Location and Sound Mirrors