Reza el dicho popular «las armas las carga el diablo«, pero yo me atrevería a decir que «la libertad la carga el diablo«.

Después de leer «Hasta que quiera mi pluma» de mi amigo Senovilla, me acordé que había leído en algún libro (me costó encontrarlo pero fue en «Frases con Historia» de José Luis García Remiro) la frase:

Libertad ¿para qué?

Ésta fue la contestación de Lenin a una pregunta de Fernando de los RíosMi viaje a la Rusia soviética«) sobre la libertad. Esta respuesta nos muestra la catadura moral de un dictador; si algo le sobra es la Libertad. No creo que merezca más detalles.

Ahora vamos a darle la vuelta a la tortilla. En el libro «Vida de Don Quijote y Sancho«, de Miguel de Unamuno, en uno de los capítulos se comenta el episodio en el que Don Quijote libera a unos galeotes, condenados a remar en galeras, y terminan, por iniciativa de Ginés de Pasamonte, apedreando a su libertador . Ante este episodio Unamuno arremete contra los que no saben qué hacer con la Libertad:

¿Libertad? Bien, ¿y qué hacemos con esto?

Tan peligroso es la falta de Libertad como que este bien, tan preciado y por el que tanta sangre se ha derramado, caiga en manos de necios, hipócritas… (bobos en general) y la utilicen para insultar y descalificar gratuitamente.

Amigo Senovilla ni un millón de éstos vale tanto como uno de los que te leemos y seguimos. Un abrazo