Gottfried Wilhelm von Leibniz fue un filósofo, matemático, jurista, historiador, bibliotecario y político alemán, al que se considera el padre del cálculo infinitesimal… ¿o fue Newton?

Ambos se basaron en antiguos estudios matemáticos y ambos se atribuyen la «invención» del cálculo infinitesimal. Leibniz publicó su obra «Acta Eroditorum» en 1684 y Newton publicó «Principia» en 1687, pero ambos aseguraban que sus estudios, no la publicación, eran anteriores a los de su «rival». Al principio, su relación epistolar era cordial e intercambiaban impresiones, pero con el tiempo la relación se fue tensando hasta que Newton lo denunció por plagio.

Los seguidores de ambos científicos echaban más leña al fuego y la disputa intelectual adquirió tintes barriobajeros. Harto de soportar descalificaciones y de perder prestigio, Leibniz decidió someter la disputa al arbitraje de la Royal Society de Londres.

¡Ingenuo! El presidente de la Royal Society de Londres era el propio Newton.