ANTECEDENTES:

Mientras Hitler invadí­a Polonia, Francia y Gran Bretaña esperaban equipararse a Alemania (en tropas y armamento) para enfrentarse a Hitler en igualdad de condiciones. Pero un hecho fortuito cambió todo. En enero de 1940, Helmut Reinberger, comandante alemán, volaba con un amigo hacia Colonia donde debí­a entregar unos documentos secretos (el plan de la fuerza aérea para invadir Holanda y Bélgica), pero una tormenta les obligó a cambiar el rumbo y un problema en el motor les hizo aterrizar en territorio belga. Fueron capturados antes de que pudieran destruir los documentos y conducidos a un puesto militar belga. Los documentos detallaban la invasión del norte de Francia a través de Bélgica y Holanda. Aún así­ Bélgica se mantuvo neutral.

PROTAGONISTAS:

  • Alemanes: general Von Rundstedt y el general Von Bock. El general Von Kleist (de caballerí­a)  y el general de división Panzer, Erwin Rommel
  • Franceses: general Maurice Gamelin (jefe del Estado Mayor) y el general Georges

CAMPAí‘A:

El 10 de mayo de 1940 los primeros panzer cruzaron la frontera de Luxemburgo.  Se poní­a en marcha la operación Sichelschnitt (tajo de hoza). La Luftwaffe tiene diversos objetivos: lanzamiento de minas en el canal de la Mancha, ataques a aeródromos de Holanda, Bélgica y Francia y transportar a la 22ª división Aerotransportada alemana con unos 4.000 paracaidistas.

Contra Holanda se dirigió toda la furia de la Luftwaffe, con cazas que ametrallaban las calles de la Haya, mientras los bombarderos se concentraban en los aeródromos.

En Bélgica habí­a una fortificación, Eben Emael, protegiendo Lieja, erizada de cañones y con un batallón de infanterí­a. La labor de neutralizarla se asignó a una fuerza de zapadores alemanes voluntarios que llegaron hasta ella en grandes planeadores remolcados por un Ju 52. En menos de 24 horas un pequeño grupo la neutralizó.

En Francia el general Gamelin dio orden de poner en marcha el plan Dyle-Breda (pensó que todo estaba ocurriendo como lo habí­a imaginado). La Luftwaffe se encargó también de vigilar a los panzer que atestaban las carreteras de las Ardenas, para impedir que ningún avión espí­a observase la concentración de carros de combate ( general Von Rundstedt) con una longitud de 160 Km. Los aliados pensaban que

Estas prematuras victorias alemanas, motivaron a los aliados a acelarar su llegada al rí­o Dyle, sin sospechar que en ese momento el Grupo de Ejército A estaba cruzando las Ardenas y al salir los primeros quedarí­an completamente rodeados. En este momento los tanques alemanes estaban atascados en las angostas carreteras de las Ardenas a 160 kilómetros de la salida, si los aliados hubieran conocido la existencia de este avance hubieran podido detenerlo en seco.Churchill es nombrado primer ministro británico tras la dimisión de Chamberlain.